Los teléfonos de hoy en día son pequeños ordenadores portátiles en nuestros bolsillos, pero a menudo olvidamos que como tal, requieren de cierto mantenimiento y limpieza. Además de que no todos los teléfonos disponen de la misma potencia y recursos, según los usos y aplicaciones, el rendimiento puede verse enormemente afectado.
Otra de las causas, de que con el paso del tiempo notes el terminal más lento, es la actualización de aplicaciones. Los desarrolladores de las mismas, van ampliando funciones, requieriendo cada vez más potencia y memoria. En terminales de gama baja esto se experimenta de forma más acusada. Con poca memoria y poca potencia de proceso, la mejora de las aplicaciones puede llegar a demandar demasiados recursos.
En esta guía te damos una serie de consejos para mejorar la velocidad de tu terminal.